Los Secretos andan de cumpleaños. El trigésimo nada menos que, para los tiempos que corren, es algo notorio, tiempos en donde los grupos se agregan y disgregan con pasmosa facilidad.Aún así, el caso de la banda madrileña tiene un valor añadido con respecto a otras formaciones que, de una forma u otra, han ido permaneciendo en el tiempo, es decir, el hecho de que tras los múltiples avatares que han sufrido desde sus lejanos comienzos, cuando eran conocidos como Tos, hasta la actualidad, nunca ha habido ocasión de temer por una separación del grupo. Desde el batería original Canito (fallecido en accidente de tráfico la última noche de 1979), pasando por el segundo batería Pedro A. Díaz, hasta llegar al mismísimo Enrique Urquijo, alma del grupo aún hoy en la actualidad y en el recuerdo constante de su hermano Álvaro, Los Secretos han recorrido un tortuoso camino donde el malditismo de los diferentes decesos citados no ha mermado lo mas mínimo su intención de continuidad.
Una continuidad que se manifestaba el pasado fin de semana, en un triple concierto en la sala Joy Eslava (jueves, viernes y sábado), con aforo completo para las tres veladas y en el que aprovecharon el momento para presentar el recopilatorio 'Los Secretos. 30 años'. Aunque eso no es todo, porque también sirvió para celebrar implícitamente la consecución de su flamante disco de Diamente otorgado a finales del mes pasado por el millón y medio de copias vendidas en esas tres décadas.
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