El músico cartagenero José Luis Valverde Cano, por todos conocido como Pepe "El Botas", ha muerto este miércoles 6 de noviembre de 2024, según informaron amigos y familiares en redes sociales.
De inabarcable trayectoria musical, desde Los Cuervos, Los Latinos, Los Rockes o Parábola, en los 60, hasta su participación en The Nativos o Los Enemigos, en los 80, pasando por Greta, La Orquesta Mondragón, Tino Casal o Luz Casal, El Botas destacó por sus actuaciones a dúo -a veces organizadas, otras sobre la marcha- con Mariano Nortes, Antonio Fidel, Carranza o Gonsales. Su particular forma de tocar la Stratocaster setentera -influido por músicos como Eric Clapton, Jeff Beck o BB King- y su puesta en escena -guiñando bien los ojos y estirando el cuello hacia afuera- eran bien reconocidas desde los tiempos de la Sala Olimpia, en Cartagena, hasta su bar de Lavapiés, pasando por el Arlequín o Casa Blasa, en su Cartagena natal, o por el Agapo y el Templo del Gato, en su Madrid adoptivo. Toda una leyenda del rock and roll, el blues y la música en general.
El Botas comenzó muy joven en la música, formando parte en los años 60 de bandas como Los Cuervos, Los Solos, Los Fanes o Los Dandis, en Cartagena.
Ya en los 70, a caballo entre Cartagena y Madrid, participó en Toni Wells, Los Latinos, Los Rockes, Parábola, Dracma, Nebulosa, Ana & Johny y Greta.
El grupo Parábola se formó en Cartagena hacia el año 1966 con el primer nombre de Los Yunio's. En 1967 se hacían llamar Los Yunio's del Mar de Cristal, nombre con el que grabaron un disco EP con cuatro canciones originales en las que participó para su composición Pepe Grano de Oro (líder de Los Puntos).
En 1971, Los Yunio's participan en el festival de bandas rock "Los Superpop" organizado por Radio Juventud de Múrcia, resultando ganadores del evento. El premio era un contrato de grabación con el sello "Philips", para lo cual debieron cambiarse de nombre por el de Parábola, ya que el de Yunio's no gustaba a la discográfica.
Por la banda pasaron entro otros, además de El Botas, Pedro Soriano, Angel Melero, Prudencio, batería, y Juan, cantante. Su primer single, el más reconocido, presenta dos temas compuestos por Ángel Melero, la balada "Julie" y la alegre y rítmica "Entonando".
Greta se formó en el año 1978 Greta con cuatro músicos cartageneros: Carlos García Vaso (quien posteriormente sería la mitad del dúo Azul y Negro), José Luis Valverde "El Botas", Arturo Terriza y Juan Moreno, con la colaboración del prestigioso músico de estudio y compositor Luis Gómez Escolar.
En 1980, la multinacional CBS editó su primer disco, un sencillo con los temas "Gira, gira" y "No quiero pasear sin mis botas de montar" y que sería el germen de su primer LP, producido por el argentino Jorge Álvarez, también responsable de los trabajos de Sissí y Trastos. En octubre de ese año participaron en una gira por Aragón y Cataluña junto a Sissi, Trastos y Alaska y los Pegamoides. El grupo se disolvió en 1981 tras la salida de García Vaso para formar Azul y Negro.
Ya en los 80, El Botas desdobla su carrera musical entre Cartagena y Madrid, participando en múltiples proyectos, en bandas de primera fila (Orquesta Mondragón, Tino Casal, Luz Casal), como músico de estudio de grandes artistas (Raphael, Rocío Durcal o Mecano), o proyectos más rocanroleros como The Nativos o Los Enemigos. Durante esta década prodiga sus actuaciones tanto en Cartagena (Bar Arlequín y Casa Blasa) como en Madrid (Agapo y Templo del Gato).
Luego llegaron The Nativos, que se formaron en 1985 bajo el liderazgo de Esteban Hirschfeld (Nacha Pop, Gabinete Caligari, Los Rápidos), junto a L.M. García Villalpando "Jimmy", como cantante, Antonio Fidel (Los Rápidos), al bajo y a la guitarra, Santi Agudo (Ciudad Jardín), Alfonso Lantero (Pistones) y José Luis Valverde "El Botas", guitarras, o incluso Josele Santiago (Los Enemigos).
A finales de 1985 grabaron su único álbum, un EP que se titulaba 'She Belongs to me' (1986. Twins), formado por tres versiones: "She belongs to me", de Bob Dylan, con arreglos de El Botas, "I can only give you everything", de The Haunted y "Night time", popularizado por The Strangeloves, más un tema propio "Stop", compuesto por Esteban Hirschfeld. El disco, producido por Paul Collins, fue grabado en los estudios Track de Madrid bajo la supervisión de Paco Martín en la parte ejecutiva. La portada fue diseñada por Pepo F. Perandones.
Corría el año 1986 cuando Los Enemigos de Josele Santiago y Fino Oyonarte se quedan sin bajista en pleno concurso RockVilla de Madrid. ¿Quién mejor que El Botas, a quien Josele conocía de la experiencia con The Nativos, para ocupar el puesto?
Descanse en paz, Pepe El Botas.
[Fuente: elmercuriodigital.net]
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9 nov 2024
8 nov 2024
Antonio Baeza presenta su libro 'Arlequín. Around Midnight', cuna del prestigioso Festival de Jazz de Cartagena
El curioso origen de uno de los festivales más consagrados de Cartagena nace de una charla entre unos amigos de los años 80 entre los que estaba el que sería durante 38 años director de uno de los grandes eventos culturales de la ciudad.
Quien no ha soñado alguna con que esos planes alocados que se inician en la barra de un bar, el Arlequín, sean realidad en algún momento de la vida. Los amigos dejando la imaginación volar para conquistar la felicidad en forma de proyectos maravillosos. Muchos de esos bosquejos, casi todos, se quedan en una fantástica charla. Otros es una espinita clavada por no haber podido iniciar el camino por falta de apoyos o simplemente por no tener presupuesto.
Serán muchas las ideas que pudieron triunfar y se quedaron o en el cajón o simplemente al recoger esas últimas cervezas de la barra de un bar, pero a veces los sueños se cumplen y para eso no podía ser ni un bar cualquiera, ni un grupo de amigos cualquiera.
Era el año 79, cuando unos amigos decidieron que Cartagena necesitaba un festival de jazz. Posiblemente no fuera lo primero que planeaban en el bar Arlequín, este grupo de colegas amantes del mundo de la cultura. Pero esta vez pusieron la primera piedra de un festival que lleva ya 43 ediciones. El Cartagena Jazz Festival nació aquel día de la mano de los socios del local. Sus primeros propietarios fueron Diego Jódar, José Luis Llamas, Alfonso López García y Antonio Baeza Reyes que se quedaría finalmente con el negocio en solitario y un quinto componente muy especial.
Entre aquellos socios fundadores estaba Paco Martín, santo y seña de la cultura cartagenera. Sería durante 38 años el director del importante festival, además de su relevancia en otros grandes eventos como la consolidada Mar de Músicas.
El bar Arlequín, situado en la calle Balcones Azules de Cartagena, fue cuna del jazz de la ciudad y Antonio Baeza recoge todos los detalles en el libro 'Arlequín. Around Midnight', donde se recuerda este espacio y un tiempo muy especial para muchos cartageneros, que lo recuerdan como el local "canalla" de la ciudad. Baeza reconoce la fama. "Era un bar pegado al Molinete y por allí pasaba gente de todo tipo de clase social, por lo que sí era un bar canalla". Ellos, como ahora hacen otros locales, apostaron por hacer exposiciones de pintura o actuaciones en directo.
El autor recuerda cómo empezó todo. "El Arlequín fue un bar que montamos entre 5 colegas que veníamos huyendo un poco de la quema de Barcelona y vinimos con la idea ya de que el bar fuera un bar distinto, que ofreciera cosas distintas y entre ellas se nos ocurrió la idea de montar un festival de jazz en Cartagena". Así, tan fácil, como quien decide los colores de las paredes en el local. Reconoce que contar con Paco Martín, fue fundamental. "Antes ya de que se le conociera en Cartagena, nosotros ya sabíamos que tenía unas expectativas, que se salían de nuestros presupuestos".
El hombre clave de la cultura en Cartagena estaba en aquel bar que cerró en septiembre de 1993, pero que sigue en la mente de quienes sin saberlo disfrutan de un festival por dónde han pasado los grandes del Jazz y que también se gestó en el Arlequín.
Ayer, jueves 7 de noviembre, tuvo lugar en el Centro Cultural Ramón Alonso Luzzy la presentación del libro con la presencia del autor junto a Antonio Marín Albalate y el legendario músico local Fernando Rubio quien también presentó su último trabajo 'Stay cool', junto a su super-banda The Inner Demons formada por los músicos Paco Del Cerro (batería), Joaquín Talismán (guitarra), Carlos Campoy (teclados) y Román García (bajo).
Edita Malbec Ediciones con fecha de lanzamiento 7 de noviembre 2024.
[Fuente: cope.es]
Quien no ha soñado alguna con que esos planes alocados que se inician en la barra de un bar, el Arlequín, sean realidad en algún momento de la vida. Los amigos dejando la imaginación volar para conquistar la felicidad en forma de proyectos maravillosos. Muchos de esos bosquejos, casi todos, se quedan en una fantástica charla. Otros es una espinita clavada por no haber podido iniciar el camino por falta de apoyos o simplemente por no tener presupuesto.
Serán muchas las ideas que pudieron triunfar y se quedaron o en el cajón o simplemente al recoger esas últimas cervezas de la barra de un bar, pero a veces los sueños se cumplen y para eso no podía ser ni un bar cualquiera, ni un grupo de amigos cualquiera.
Era el año 79, cuando unos amigos decidieron que Cartagena necesitaba un festival de jazz. Posiblemente no fuera lo primero que planeaban en el bar Arlequín, este grupo de colegas amantes del mundo de la cultura. Pero esta vez pusieron la primera piedra de un festival que lleva ya 43 ediciones. El Cartagena Jazz Festival nació aquel día de la mano de los socios del local. Sus primeros propietarios fueron Diego Jódar, José Luis Llamas, Alfonso López García y Antonio Baeza Reyes que se quedaría finalmente con el negocio en solitario y un quinto componente muy especial.
Entre aquellos socios fundadores estaba Paco Martín, santo y seña de la cultura cartagenera. Sería durante 38 años el director del importante festival, además de su relevancia en otros grandes eventos como la consolidada Mar de Músicas.
El bar Arlequín, situado en la calle Balcones Azules de Cartagena, fue cuna del jazz de la ciudad y Antonio Baeza recoge todos los detalles en el libro 'Arlequín. Around Midnight', donde se recuerda este espacio y un tiempo muy especial para muchos cartageneros, que lo recuerdan como el local "canalla" de la ciudad. Baeza reconoce la fama. "Era un bar pegado al Molinete y por allí pasaba gente de todo tipo de clase social, por lo que sí era un bar canalla". Ellos, como ahora hacen otros locales, apostaron por hacer exposiciones de pintura o actuaciones en directo.
El autor recuerda cómo empezó todo. "El Arlequín fue un bar que montamos entre 5 colegas que veníamos huyendo un poco de la quema de Barcelona y vinimos con la idea ya de que el bar fuera un bar distinto, que ofreciera cosas distintas y entre ellas se nos ocurrió la idea de montar un festival de jazz en Cartagena". Así, tan fácil, como quien decide los colores de las paredes en el local. Reconoce que contar con Paco Martín, fue fundamental. "Antes ya de que se le conociera en Cartagena, nosotros ya sabíamos que tenía unas expectativas, que se salían de nuestros presupuestos".
El hombre clave de la cultura en Cartagena estaba en aquel bar que cerró en septiembre de 1993, pero que sigue en la mente de quienes sin saberlo disfrutan de un festival por dónde han pasado los grandes del Jazz y que también se gestó en el Arlequín.
Ayer, jueves 7 de noviembre, tuvo lugar en el Centro Cultural Ramón Alonso Luzzy la presentación del libro con la presencia del autor junto a Antonio Marín Albalate y el legendario músico local Fernando Rubio quien también presentó su último trabajo 'Stay cool', junto a su super-banda The Inner Demons formada por los músicos Paco Del Cerro (batería), Joaquín Talismán (guitarra), Carlos Campoy (teclados) y Román García (bajo).
Edita Malbec Ediciones con fecha de lanzamiento 7 de noviembre 2024.
[Fuente: cope.es]
7 nov 2024
'Títere con cabeza', primer libro de relatos de Manolo García
Manolo García reflexiona con ironía en su primer libro de relatos sobre nuestra posición en el mundo a través de historias humanas de supervivencia y picaresca que trazan un retrato de todos nosotros.
'Títere con cabeza' es un "beatus ille" moderno, una crítica desde el humor y la reflexión cáustica a nuestra vida actual, tan llena y tan vacía, a nuestras estructuras mentales y sociales, y una llamada a la animalidad, al instinto y a dar valor a las cosas más anodinas y sencillas de la existencia.
A través de los relatos de este libro, Manolo García nos introduce en una máquina del tiempo, nos hace viajar al pasado, a Woodstock o a la guerra civil española, y a la vez nos proyecta a futuros donde la IA y los androides son protagonistas. Sin embargo, los personajes de todos ellos parten de una premisa común: su pasmosa, simple y minúscula condición de humanidad. Son historias anti épicas, anti heróicas, de supervivencia y picaresca, que componen un retrato grotesco y a la vez entrañable de todos nosotros.
«Y sigo y seguiré queriendo mientras viva, ver el brillo de la luna reflejado en las pupilas de las cabras, sentir cómo el viento de la noche brama mientras las contraventanas golpetean contra las paredes de barro y paja de mi casita en el campo. En paz estoy y me río de los peces de colores. Mi patria son estos montes y mi familia, y mi destino las personas del pueblo más cercano con las que me relaciono y con las que juego al dominó algunas tardes. Y no sé nada de administraciones ni administradores, porque para ellos yo ya no existo, de lo cual doy gracias a los cielos, pues no está escrito en ningún lugar que nadie pueda tener la potestad de dirigir los designios de persona alguna sin el meditado y medido consentimiento de esta. Porque, como bien saben ustedes, y a mí que me registren, cada títere tiene su pertinente cabeza».
Edita Verso & Cuento con fecha de lanzamiento 7 de noviembre de 2024.
[Fuente: penguinlibros.com]
'Títere con cabeza' es un "beatus ille" moderno, una crítica desde el humor y la reflexión cáustica a nuestra vida actual, tan llena y tan vacía, a nuestras estructuras mentales y sociales, y una llamada a la animalidad, al instinto y a dar valor a las cosas más anodinas y sencillas de la existencia.
A través de los relatos de este libro, Manolo García nos introduce en una máquina del tiempo, nos hace viajar al pasado, a Woodstock o a la guerra civil española, y a la vez nos proyecta a futuros donde la IA y los androides son protagonistas. Sin embargo, los personajes de todos ellos parten de una premisa común: su pasmosa, simple y minúscula condición de humanidad. Son historias anti épicas, anti heróicas, de supervivencia y picaresca, que componen un retrato grotesco y a la vez entrañable de todos nosotros.
«Y sigo y seguiré queriendo mientras viva, ver el brillo de la luna reflejado en las pupilas de las cabras, sentir cómo el viento de la noche brama mientras las contraventanas golpetean contra las paredes de barro y paja de mi casita en el campo. En paz estoy y me río de los peces de colores. Mi patria son estos montes y mi familia, y mi destino las personas del pueblo más cercano con las que me relaciono y con las que juego al dominó algunas tardes. Y no sé nada de administraciones ni administradores, porque para ellos yo ya no existo, de lo cual doy gracias a los cielos, pues no está escrito en ningún lugar que nadie pueda tener la potestad de dirigir los designios de persona alguna sin el meditado y medido consentimiento de esta. Porque, como bien saben ustedes, y a mí que me registren, cada títere tiene su pertinente cabeza».
Edita Verso & Cuento con fecha de lanzamiento 7 de noviembre de 2024.
[Fuente: penguinlibros.com]
Lo último de Luís Farnox se titula 'La ropa de difuntos que habita los armarios'
Un libro que, a través de sus numerosas ilustraciones y medio centenar de poemas, nos invita a recorrer parajes misteriosos poco transitados y con la crítica social como música de fondo. Los armarios viejos son los bolsillos rotos de las habitaciones. Custodios de la ropa de difuntos que yace colgada y espera resignada su sentencia. Son la milla verde de trapos, vestidos, abrigos y bufandas; los retales tristes de tiempos mejores. Algunas prendas sueñan con una segunda oportunidad en la piel de un nuevo huésped.
Estás a punto de abrir, por voluntad propia, la puerta chirriante de un "poemArmario". Probablemente oirás murmullos y voces inquietantes en su interior; no temas, no lo tengas en cuenta, haz caso a Sófocles: «Para quien tiene miedo, todo son ruidos». No te dejes impresionar. El más allá es el truco de magia mejor guardado de todos los tiempos, porque el ilusionista y el espectador son la misma persona, tú.
Luis Farnox es compositor, autor, poeta y dibujante. Estudió magisterio y confiesa que su vocación de maestro la ejerce en cada concierto y recital. Ejerció muy joven de cantautor-eléctrico y músico callejero luego, durante la movida madrileña, puso voz a grupos como Zona Zero y Vº Congreso; sin embargo, la marca El Mecánico del Swing fue quien le ha dado a conocer durante más de dos décadas.
Entre su obra literaria podemos destacar: 'Canciones por no llorar' (1980); 'Memorias de un hombre orquesta' (2009); 'Josefina el alma del poeta' (2010); 'Viaje Espiral' (2012); 'El más bello despilfarro' (2014); 'BarrioAndante' (2015), junto a Ángel Petisme; 'La palabra habitada' (2018); Respecto a literatura infantil y juvenil ha publicado tres novelas: ?Zascanduri y El Bosque Flotante? (2015); ?El avance de Aphatía? (2020); ?La 'Invasión' (2023). Una trilogía dentro del universo Zascanduri. También ha sido editado 'Zascan Fábulas' un libro de fábulas originales en verso y bellamente ilustrado por la joven dibujante Jana GutiSa.
Farnox, está presente en una docena de antologías poéticas y ha sido galardonado con varios premios como escritor y compositor. En su faceta de cantante e instrumentista ha participado en más de cincuenta discos de artistas de la categoría de Joaquín Sabina, Rafael Amor, Ángel Petisme, Rojo Cancionero, El Queco, La Banda, Los Pecadores, La Guardia, Tennessee, Alberto Cortez, Zascanduri, Joaquín Lera. Como dibujante ha ilustrado, cómics, discos y libros para diferentes creadores.
Estás a punto de abrir, por voluntad propia, la puerta chirriante de un "poemArmario". Probablemente oirás murmullos y voces inquietantes en su interior; no temas, no lo tengas en cuenta, haz caso a Sófocles: «Para quien tiene miedo, todo son ruidos». No te dejes impresionar. El más allá es el truco de magia mejor guardado de todos los tiempos, porque el ilusionista y el espectador son la misma persona, tú.
Luis Farnox es compositor, autor, poeta y dibujante. Estudió magisterio y confiesa que su vocación de maestro la ejerce en cada concierto y recital. Ejerció muy joven de cantautor-eléctrico y músico callejero luego, durante la movida madrileña, puso voz a grupos como Zona Zero y Vº Congreso; sin embargo, la marca El Mecánico del Swing fue quien le ha dado a conocer durante más de dos décadas.
Entre su obra literaria podemos destacar: 'Canciones por no llorar' (1980); 'Memorias de un hombre orquesta' (2009); 'Josefina el alma del poeta' (2010); 'Viaje Espiral' (2012); 'El más bello despilfarro' (2014); 'BarrioAndante' (2015), junto a Ángel Petisme; 'La palabra habitada' (2018); Respecto a literatura infantil y juvenil ha publicado tres novelas: ?Zascanduri y El Bosque Flotante? (2015); ?El avance de Aphatía? (2020); ?La 'Invasión' (2023). Una trilogía dentro del universo Zascanduri. También ha sido editado 'Zascan Fábulas' un libro de fábulas originales en verso y bellamente ilustrado por la joven dibujante Jana GutiSa.
Farnox, está presente en una docena de antologías poéticas y ha sido galardonado con varios premios como escritor y compositor. En su faceta de cantante e instrumentista ha participado en más de cincuenta discos de artistas de la categoría de Joaquín Sabina, Rafael Amor, Ángel Petisme, Rojo Cancionero, El Queco, La Banda, Los Pecadores, La Guardia, Tennessee, Alberto Cortez, Zascanduri, Joaquín Lera. Como dibujante ha ilustrado, cómics, discos y libros para diferentes creadores.
Edita: Desacorde Ediciones.
[Fuente: Contraportada del libro]
Exposición en conmemoración del 40 Aniversario de la 'Muestra de pop, rock y otros rollos' y disco
Hoy, 7 de noviembre de 2024, se inaugura en la sala de exposiciones Depósitos Pignatelli (Paseo de Cuéllar, 4. Zaragoza) una exposición que conmemora el 40º aniversario de un movimiento único que se dio en Zaragoza en 1984. La muestra estará vigente hasta el 2 de febrero de 2025.
Tan solo fueron tres días con sus respectivas tres noches, pero, de alguna manera, lograron transformar la escena musical aragonesa. La Muestra de pop, rock y otros rollos, celebrada entre el 23 y el 25 de marzo de 1984, supuso un antes y un después en el mapa sonoro de la comunidad. No tanto por los grupos que se subieron al escenario durante esos tres días, como por los que fueron surgiendo después gracias a las conexiones que se establecieron en aquel Pabellón Francés de la antigua Feria de Muestras de Zaragoza.
De hecho, la cita fue como un gran semillero de ideas e inquietudes que germinó luego en una auténtica explosión de talento. En medio de ese ecosistema de creatividad, los componentes de unas bandas se juntaron con otros y de ahí surgió la semilla de grupos ya históricos como Héroes del Silencio, Más Birras, Niños del Brasil o Los Especialistas. En la muestra participaron bandas como Proceso Entrópico (en la que Bunbury tocaba el bajo), Zumo de Vidrio (con Pedro y Juan Valdivia), Edición Fría (con Joaquín Cardiel), Golden Zippers (con Mauricio Aznar), Ferrobós (con Gabriel Sopeña), John Landis Fans (con Santi Rex),...
«Todos ellos empezaron a relacionarse entre sí dando lugar a proyectos tan enormes como Héroes del Silencio. ¿Que el grupo se hubiera formado igualmente sin celebrarse la muestra? Pues es algo que no sabemos, pero de lo que nadie duda es de que el encuentro fue un revulsivo para la escena zaragozana», subraya Luis Linacero, que formó parte del GOM (Grupo Organizador de la Muestra).
El encuentro fue un punto de inflexión en todos los sentidos. En 1982, el ayuntamiento había organizado el concurso de rock ciudad de Zaragoza, en el que ya despuntaban Distrito 14 o los citados Golden Zippers, pero poco más se habia promovido en el apartado musical. Los impulsores de la muestra tenían claro que no querían que el espíritu competitivo de los concursos sobrevolara el encuentro y poco a poco fueron ideando una muestra en la que participaron nada más y nada menos que 50 grupos de la comunidad. «Había de todo, bandas que sonaban muy bien y otras que muy mal. Y eso que hicimos selección con las maquetas que nos tenían que mandar, pero es lógico porque algunos grupos se formaron simplemente para cobrar las 10.000 pesetas que se pagaba por participar», recuerda Linacero, que apunta que en esa épocas muchas de las bandas nunca habían cobrado por actuar.
La muestra incluyó propuestas de todos los géneros (pop, rock, heavy, punk, rockabilly, tecno...) y, además, contrató a cabezas de cartel para cerrar cada uno de los días. Así, por el Pabellón Francés pasaron grupos ya consolidados como Gabinete Caligari, PVP, Decibelios o los propios Distrito 14. «Lo más increíble es que logramos vender 26.000 entradas», destaca Chema Fernández (de Antípodas Producciones), que también fue miembro del GOM. «La muestra fue un catalizador en todos los sentidos; sin ella, por ejemplo, no se hubieran impulsado tan rápido las salas de conciertos en la ciudad», apunta.
Pero la muestra fue más allá de la música, ya que también albergó exposiciones, obras de teatro, proyecciones de videos, puestos con los fanzines y los cómics de la época, las radios libres de esos años y hasta un desfile de moda. «Fue como una explosión de la cultura 'underground' que latía en la ciudad y una de esas citas irrepetibles. Nunca se había hecho nada parecido y la gente lo cogió con muchas ganas», rememora el fotógrafo Ángel de Castro.
Sin duda, algo relevante sucedió en esos tres días de 1984 para que 40 años después aún se recuerden. De hecho, hoy jueves se va a inaugurar en los antiguos depósitos de agua del Parque Pignatelli una exposición que reivindicará la muestra en su 40 aniversario. Organizada por Perdidos en los 80 Producciones y Discos Linacero, con el apoyo del Ayuntamiento de Zaragoza, la exposición ofrecerá un completo recorrido, partiendo de la escena musical de principios de los 80 y concluyendo con la edad de oro que se vivió entre 1985 y 1989, con muchos grupos en pleno auge.
La exposición también recordará la semilla de una muestra que comenzó a fraguarse en el rastro de Zaragoza. «En esos años, todos a los que nos gustaba la música nos juntábamos en el puesto de accesorios rockeros que tenía Jaime Berdejo. Poco a poco fuimos creando una pequeña comunidad y comenzamos a darle vueltas a la posibilidad de hacer un evento para reunir a varias bandas. Jaime, que era muy emprendedor, se puso en contacto con algunos técnicos del ayuntamiento y recibieron muy bien la propuesta», explica Linacero.
En ese sentido, el papel del consistorio fue clave para que la muestra se convirtiera en una realidad. «También hay que tener en cuenta que en esos años los poderes públicos se querían acercar a los jóvenes, eran tiempos de cambio como se demostraba en Madrid con Tierno Galván...», rememora Chema Fernández, que destaca que el ayuntamiento aceptó todas las condiciones del GOM, algo «impensable actualmente».
Además de la exposición que va a reivindicar la ya mítica Muestra de pop, rock y otros rollos, también se ha editado un disco con grupos de la época. Se titula ‘Cierzo & birra & rock and roll’ y lo ha impulsado el colectivo Perdidos en los 80 en colaboración con Discos Linacero. La cara A reúne tres canciones de bandas que ya estaban en marcha en 1984 (Alta Sociedad, Golden Zippers y Distrito 14) y la cara B a grupos que ganaron fuerza después (Pedro Botero, Ferrobós y John Landis Fans). Se trata de un vinilo de 10" que se podrá comprar en la exposición y por internet.
Tracklist:
01. Alicia. Alta Sociedad
02. Vivir a mi manera. Golden Zippers
03. Todo sería más normal (Inédito). Distrito 14
04. Desertor. Pedro Botero
05. Resaca. Ferrobós
06. Palabras desde el frente. John Landis Fans
[Fuente: Rubén López para elperiodicodearagon.com -Enlace original-]
Tan solo fueron tres días con sus respectivas tres noches, pero, de alguna manera, lograron transformar la escena musical aragonesa. La Muestra de pop, rock y otros rollos, celebrada entre el 23 y el 25 de marzo de 1984, supuso un antes y un después en el mapa sonoro de la comunidad. No tanto por los grupos que se subieron al escenario durante esos tres días, como por los que fueron surgiendo después gracias a las conexiones que se establecieron en aquel Pabellón Francés de la antigua Feria de Muestras de Zaragoza.
De hecho, la cita fue como un gran semillero de ideas e inquietudes que germinó luego en una auténtica explosión de talento. En medio de ese ecosistema de creatividad, los componentes de unas bandas se juntaron con otros y de ahí surgió la semilla de grupos ya históricos como Héroes del Silencio, Más Birras, Niños del Brasil o Los Especialistas. En la muestra participaron bandas como Proceso Entrópico (en la que Bunbury tocaba el bajo), Zumo de Vidrio (con Pedro y Juan Valdivia), Edición Fría (con Joaquín Cardiel), Golden Zippers (con Mauricio Aznar), Ferrobós (con Gabriel Sopeña), John Landis Fans (con Santi Rex),...
«Todos ellos empezaron a relacionarse entre sí dando lugar a proyectos tan enormes como Héroes del Silencio. ¿Que el grupo se hubiera formado igualmente sin celebrarse la muestra? Pues es algo que no sabemos, pero de lo que nadie duda es de que el encuentro fue un revulsivo para la escena zaragozana», subraya Luis Linacero, que formó parte del GOM (Grupo Organizador de la Muestra).
El encuentro fue un punto de inflexión en todos los sentidos. En 1982, el ayuntamiento había organizado el concurso de rock ciudad de Zaragoza, en el que ya despuntaban Distrito 14 o los citados Golden Zippers, pero poco más se habia promovido en el apartado musical. Los impulsores de la muestra tenían claro que no querían que el espíritu competitivo de los concursos sobrevolara el encuentro y poco a poco fueron ideando una muestra en la que participaron nada más y nada menos que 50 grupos de la comunidad. «Había de todo, bandas que sonaban muy bien y otras que muy mal. Y eso que hicimos selección con las maquetas que nos tenían que mandar, pero es lógico porque algunos grupos se formaron simplemente para cobrar las 10.000 pesetas que se pagaba por participar», recuerda Linacero, que apunta que en esa épocas muchas de las bandas nunca habían cobrado por actuar.
La muestra incluyó propuestas de todos los géneros (pop, rock, heavy, punk, rockabilly, tecno...) y, además, contrató a cabezas de cartel para cerrar cada uno de los días. Así, por el Pabellón Francés pasaron grupos ya consolidados como Gabinete Caligari, PVP, Decibelios o los propios Distrito 14. «Lo más increíble es que logramos vender 26.000 entradas», destaca Chema Fernández (de Antípodas Producciones), que también fue miembro del GOM. «La muestra fue un catalizador en todos los sentidos; sin ella, por ejemplo, no se hubieran impulsado tan rápido las salas de conciertos en la ciudad», apunta.
Pero la muestra fue más allá de la música, ya que también albergó exposiciones, obras de teatro, proyecciones de videos, puestos con los fanzines y los cómics de la época, las radios libres de esos años y hasta un desfile de moda. «Fue como una explosión de la cultura 'underground' que latía en la ciudad y una de esas citas irrepetibles. Nunca se había hecho nada parecido y la gente lo cogió con muchas ganas», rememora el fotógrafo Ángel de Castro.
Sin duda, algo relevante sucedió en esos tres días de 1984 para que 40 años después aún se recuerden. De hecho, hoy jueves se va a inaugurar en los antiguos depósitos de agua del Parque Pignatelli una exposición que reivindicará la muestra en su 40 aniversario. Organizada por Perdidos en los 80 Producciones y Discos Linacero, con el apoyo del Ayuntamiento de Zaragoza, la exposición ofrecerá un completo recorrido, partiendo de la escena musical de principios de los 80 y concluyendo con la edad de oro que se vivió entre 1985 y 1989, con muchos grupos en pleno auge.
La exposición también recordará la semilla de una muestra que comenzó a fraguarse en el rastro de Zaragoza. «En esos años, todos a los que nos gustaba la música nos juntábamos en el puesto de accesorios rockeros que tenía Jaime Berdejo. Poco a poco fuimos creando una pequeña comunidad y comenzamos a darle vueltas a la posibilidad de hacer un evento para reunir a varias bandas. Jaime, que era muy emprendedor, se puso en contacto con algunos técnicos del ayuntamiento y recibieron muy bien la propuesta», explica Linacero.
En ese sentido, el papel del consistorio fue clave para que la muestra se convirtiera en una realidad. «También hay que tener en cuenta que en esos años los poderes públicos se querían acercar a los jóvenes, eran tiempos de cambio como se demostraba en Madrid con Tierno Galván...», rememora Chema Fernández, que destaca que el ayuntamiento aceptó todas las condiciones del GOM, algo «impensable actualmente».
Además de la exposición que va a reivindicar la ya mítica Muestra de pop, rock y otros rollos, también se ha editado un disco con grupos de la época. Se titula ‘Cierzo & birra & rock and roll’ y lo ha impulsado el colectivo Perdidos en los 80 en colaboración con Discos Linacero. La cara A reúne tres canciones de bandas que ya estaban en marcha en 1984 (Alta Sociedad, Golden Zippers y Distrito 14) y la cara B a grupos que ganaron fuerza después (Pedro Botero, Ferrobós y John Landis Fans). Se trata de un vinilo de 10" que se podrá comprar en la exposición y por internet.
Tracklist:
01. Alicia. Alta Sociedad
02. Vivir a mi manera. Golden Zippers
03. Todo sería más normal (Inédito). Distrito 14
04. Desertor. Pedro Botero
05. Resaca. Ferrobós
06. Palabras desde el frente. John Landis Fans
[Fuente: Rubén López para elperiodicodearagon.com -Enlace original-]
3 nov 2024
Anos 80: Movida, Atlantismo, Vangardismo e Underground
Acaba de ver la luz "Anos 80: Movida, Atlantismo, Vangardismo e Underground" (Editorial Galaxia), el nuevo libro de Fernando Fernández Rego.
De hecho la primera presentación se producía hace apenas un par de noches en una abarrotada sala Komisky de Vigo, en donde María Pereira, Teo Cardalda y Miguel Moreira acompañaron al autor en esta puesta de largo en la ciudad olívica.
Ahora, en este nueva entrega Fernando, nos lleva de viaje por la agitada Galicia de los años 80 "esa década intensa y rupturista que marcó el futuro de la música y de las artes en Galicia.
Aunque la música es el eje central del libro, tenemos paradas en la contracultura, el hazlo tu mismo, los fanzines, el audiovisual, la poesía y la plástica. Y es que hablamos de tiempos nuevos y efervescentes en los que proliferaron los caminos alternativos y subterráneos, en los que tiene lugar una transformación radical, tanto de la sociedad como das artes.
Los focos estaban en Vigo y A Coruña, y pararemos en esas ciudades, pero el objetivo del libro es reivindicar también escenas y grupos que tuvieron una menor divulgación y reconocimiento. Conecer las dificultades que encontraron para sacar propuestas adelante desde el país, teniendo en cuenta que la industria musical estaba aún vertebrándose por estos lares.
Veremos como por toda la geografía gallega surgen en estos años formaciones, se elaboran fanzines y boletines culturales e contraculturales, y comienza a abrirse un camino que seguirían posteriormente muchos otros. Abriremos el abanico estilístico, centrándonos además del pop y el rock, también en géneros que tienen una importante pujanza como el punk y el heavy y otros que empezaban a despegar como el garage y el hip hop.
Analizaremos en profundidad el Atlantismo y la Movida. En el caso de esta última veremos las distintas opiniones y perspectivas sobre ella que el tiempo fue generando. Y también las escenas que quedaron escondidas a su sombra. Los 80 fueron años intensos, creativos y a veces, salvajes. Unos siguen mitificando aquellos años, otros los desmitifican… el objetivo es que después de leer el libro cada uno reflexione sobre todo aquello y saque sus propias conclusiones".
[Redacción Nuevaola80. Ricky Rodríguez]
La próxima presentación se producirá en el Mercado de abastos de Pontevedra, el 7 de noviembre a las 20:00 h.